Podemos decir que hoy, el consumo es uno de los vectores que
vertebran nuestra sociedad. La producci贸n masiva de bienes y servicios para un
consumo masivo es una de sus caracter铆sticas esenciales.
Etimol贸gicamente, el verbo consumir es sin贸nimo de destruir,
extinguir, gastar. Las ciencias sociales le atribuyeron la dimensi贸n de uso de
bienes y servicios para la satisfacci贸n de necesidades, y de deseos, cabr铆a
a帽adir. Es decir que el consumo tendr铆a una dimensi贸n tanto econ贸mica como
simb贸lica. La actividad consumidora, no sujeta al remedio de necesidades
elementales, se extendi贸 entre las clases acomodadas de las grandes ciudades
europeas y de EEUU durante el siglo XIX, momento en el que aparecen los
primeros grandes almacenes y la creaci贸n de sistemas urbanos de transporte. Su
expansi贸n al resto de las clases
sociales se produce durante la segunda mitad del siglo XX,
a帽os de la producci贸n y el consumo de masas. En nuestras actuales sociedades,
son pocos los sectores sociales que quedan al margen de la actividad
consumidora, y a煤n menos los que no desean ejercerla.
¿Qu茅 rasgos definen una sociedad de consumo?
Producci贸n de bienes de forma barata y en gran cantidad.
Los bienes son rentables si se vende todo aquello que se
produce.
Para vender todo lo que se produce, es preciso convencer a
las personas, ahora convertidas en consumidoras.
La publicidad, o medio por el que se induce a las personas
al consumo.
Sustituci贸n de la necesidad por el deseo: consumimos m谩s de
lo que necesitamos.
Un problema econ贸mico: ¿en qu茅 medida la sociedad de consumo
cubre nuestras necesidades?, ¿destina excesivos recursos (valiosos) a la
satisfacci贸n de deseos f煤tiles, mientras deja sin cubrir necesidades
fundamentales?
Un problema ecol贸gico: la actividad de nuestro modelo
socioecon贸mico y su modelo de producci贸n y consumo choca con los l铆mites
biof铆sicos del planeta y resulta insostenible a medio plazo. Los actuales
patrones de consumo implicar铆an que los espa帽oles necesitar铆amos casi 3,5 veces
nuestro territorio para satisfacer los recursos naturales que demandamos. El
consumo es una de las variables de incidencia en el cambio global (cambio
clim谩tico, p茅rdida de biodiversidad, alteraci贸n de la mayor铆a de los
ecosistemas naturales, restricciones en el acceso a energ铆a abundante y
barata).
Un problema social: el consumo es tambi茅n una pr谩ctica
social, una forma concreta, desigual y conflictiva de apropiaci贸n material y de
utilizaci贸n del sentido que adquieren los objetos en la sociedad de consumo por
parte de grupos sociales con capitales (econ贸micos, simb贸licos, sociales,
culturales) distintos y desde posiciones sociales distintas. Conlleva, como
hemos visto, una serie de riesgos por lo que parece necesario su control y
vigilancia social y pol铆tica. El consumo es hoy un elemento fundamental en la
construcci贸n de identidades sociales y de estilos de vida es decir, las
actividades de la vida cotidiana, del ocio y del consumo… pero tambi茅n una
cuesti贸n de pol铆ticas p煤blicas.
Vamos a detenernos un poco en este aspecto. Nuestra vida
cotidiana est谩 influida por factores econ贸micos y sociales, de base material,
pero tambi茅n por la influencia de las ideas, los deseos, las im谩genes… y esta
dimensi贸n cobra una especial relevancia en sociedades como la nuestra, con din谩micas
propias del proceso de individualizaci贸n y de b煤squeda de una identidad
distintiva, en las que las pr谩cticas de consumo juegan un papel fundamental.
Cuando hablamos de estilos de vida, hablamos del resultado
de un sistema de valores, actitudes, actividades y comportamientos de consumo.
Es decir, de la manera que tienen las personas de vivir, gastar su tiempo y su
dinero. Los estilos de vida, asociados a nuestras actuales sociedades y niveles
de consumo –y su impacto tanto sobre los l铆mites biof铆sicos como por las
din谩micas sociales que genera– obliga a que tambi茅n las situemos en el centro a
la hora de reflexionar sobre nuestro entorno, y a la hora de plantear
propuestas alternativas.
Hacia estilos de vida m谩s saludables.
La necesidad de pensar en c贸mo generar un cambio social del
consumo y hacia estilos de vida sostenibles se presenta hoy como prioritaria
por todo lo expuesto. La b煤squeda de alternativas deber谩 considerar varios
谩mbitos: alimentaci贸n, residuos, empleo y usos de tiempo, movilidad y consumo
energ茅tico en el hogar. Y abordarse desde varios planos: el institucional, el
individual, el colectivo. Modificar las pautas de consumo afecta a nuestro
modelo cultural, social, econ贸mico y pol铆tico. Por todo ello, es preciso
resituar el consumo en el debate pol铆tico. Una dimensi贸n a tener en cuenta
ser谩n las pol铆ticas p煤blicas capaces de generar din谩micas sociales orientadas a
promover otros modelos de consumo, que permitan mantener una calidad de vida
alta sin exceder los l铆mites de biocapacidad de los ecosistemas. Pol铆ticas
p煤blicas unidas a las iniciativas emanadas de la sociedad civil y de la acci贸n
colectiva son motores de cambio fundamentales.
Regeneraci贸n democr谩tica: clave para la reflexi贸n y la
acci贸n en el contexto de crisis ecosocial
Por regeneraci贸n democr谩tica de nuestra sociedad entendemos
la apertura de debates sociales, empoderamiento social, regeneraci贸n
institucional, revitalizaci贸n del sistema pol铆tico. Solo a trav茅s de ella se
pueden poner en marcha cambios estructurales, pero para ello es indispensable
una sociedad civil fortalecida. Sin embargo, en el contexto socioecon贸mico
actual, las necesarias pol铆ticas progresivas chocar铆an con los intereses del
sector empresarial, as铆 como con la poblaci贸n, que tiende a mostrarse reacia
hacia medidas que intervengan en sus pr谩cticas cotidianas.
Estamos en un c铆rculo vicioso: si no se producen cambios en
las pr谩cticas propias, el cambio de valores tiende a ser insuficiente o mera
declaraci贸n de intenciones; si no se produce un cambio en el contexto, el
cambio de las pr谩cticas estar谩 muy limitado y dif铆cilmente llegara a una
mayor铆a social; si no hay cambio de valores, no se crear谩 un caldo de cultivo
social que promueva cambios estructurales capaces de modificar el contexto… y
vuelta a empezar.
¿C贸mo salir de este c铆rculo vicioso? Las transformaciones
del consumo y de los estilos de vida y din谩micas de empoderamiento comunitario
son una posible v铆a: permite la acci贸n pol铆tica, toma de consciencia,
construcci贸n de identidad social y colectiva.
Aunque irremediablemente la sostenibilidad y la transici贸n
hacia estilos de vida m谩s sostenibles comporta un cambio social, de modelo, de
estructuras, un nuevo contrato social que deber谩 incluir la variable ambiental
y ecol贸gica.
M. Heras, C. Pi帽eiro, 脕. Porro, «Mirar al futuro para
transformar el presente: propuestas de acci贸n hacia el cambio socio ecol贸gico»,
Papeles de relaciones eco sociales y cambio global, 121, 2013, pp. 33-48. 脕.
Porro, «Pol铆ticas p煤blicas y cambios de consumo y estilos de vida: de c铆rculos
viciosos a c铆rculos virtuosos», Papeles de relaciones eco sociales y cambio
global, 121, 2013, pp. 59-75. CCEIM/CRIC, Cambio global Espa帽a, 2020/50.
Consumo y estilos de vida
[http://revistaopciones.org/es/blog/informe-consumo-y-cambio-global].